El nacimiento del plástico (I)

Dentro de millones de años, nuestra era será recordada como "Edad del plástico", afirmación a la que ya se suman varios expertos como el premio Novel Paul Jhon Flory; y es que, en nuestra vida cotidiana estamos rodeados de plásticos y polímeros. Pero esto no ha sido casualidad, si no que se debe a un conjunto de sucesos históricos.

El primer producto polimérico del que se tiene constancia, data del 1.839 cuando el científico Charles Goodyear a través de modificar las propiedades mecánicas de la goma natural (que se extraía de un árbol autóctono de Brazil), mezclándolo con azufre. De esto, consiguió un material seco y flexible a cualquier temperatura. Pronto, se convirtió en un producto comercial que se vendió como vulcanización.

En 1.845, Alexander Parkes, mediante la experimentación con goma natural, obtiene un material que podía ser usado tanto en sólido como en líquido . Recibió el nombre de Parkesina pero no tuvo el éxito comercial esperado por su coste de producción.

En 1.868, la empresa encargada de producir bolas de billar en Estados Unidos, Phetan and Collander presentó un concurso que consistía en encontrar un material capaz de sustituir al marfil en el billar. John W. Hyatt desarrolló la Parkesina consiguiendo un producto muy similar pero muy rentable, que en 1.870 fue patentado como el celuloide. Hay que decir que este descubrimiento fue una serendipia (descubrimiento que se hace sin querer) pero de esto hablaremos en otro momento.

En el mismo año de su patentación, fue abierta la primera fábrica de materia plástica artificial que se llamó Albany Dental Plate Company, ya que se hizo muy famosa entre los dentistas; y, durante mucho tiempo, triunfó y se utilizó casi para todo, no obstante tenía un problema: era muy inflamable.

En 1.872 E. Baumann desarrolló una investigación sobre la polimerización del cloruro de vinilo, pero no fue hasta 1.880 cuando el químico Ivanovic Ostromislenski consiguió desarrollar la producción industrial de los primeros polímeros vinílicos.